Amanda Beard, Campeona Olímpica y Super Modelo…

La campeona olímpica de 200 pecho Amanda Bearda, comenzó a entrenar, donde busca tiempo, entre su ocupada agenda de desfiles y sesiones de fotográficas.

A los 25 años, Amanda ha estado en el salón de bañadores “Swimwear Market Week Fashion” que se celebra en Nueva York una semana entera dedicada a los desfiles y presentaciones de los nuevos productos en trajes de baño. Su vida está plenamente dedicada a acciones promocionales y comerciales con sus sponsors, combinando una agenda apretada de presentaciones, sesiones de fotos, viajes, promociones, entrevistas, y suponemos que ciando queda algo de tiempo se tira a la piscina a remojarse.

 Volver a los entrenamientos después de dos años de tranquilidad ya estaba dentro de sus planes después de un 2004 excelente, en el que batió el record del mundo de 200 pecho, proclamándose campeona olímpica de la distancia. Luego pasó a ser una de las modelos norteamericanas más solicitadas. Se hizo muy popular hasta el punto que la revista Sports Illustrated publicó que Amanda se había convertido en la deportista más deseada por el publico masculino.

 La carrera de Amanda arrancó con 14 años en los Juegos Olímpicos de Atlanta 1996 consiguiendo ser la segunda medallista americana más joven en unos Juegos Olímpicos. Cuatro años más tarde, en Sydney 2000, Amanda consiguió un bronce en los 200 pecho, pero su consagración vino en Atenas 2004 donde además del oro en 200 pecho consiguió una plata en 200 estilos y otra plata en el relevo de 4×100 estilos. En el 2005 fue la atleta más buscada en Google, algo que da cuenta de su gran popularidad. Sus patrocinadores más importantes son Red Bull, Mutual of Omaha y Penta (una marca de agua mineral), aunque trabaja para muchos otros.

 En 2005, Beard se enamoró de Carl Edwards, piloto de la NASCAR, y se pasó el año siguiéndolo, en todas las carreras del circuito a lo largo del país, pero su aventura terminó el verano pasado. Entonces puso a la venta su casa de Tucson y se compró una nueva casa cerca de Los Ángeles en California.

 Actualmente, reside en Vence, California, y ha vuelto a entrenar con Dave Salo, de la Universidad de Southern California – USA (USC), quien fuera su entrenador de la época de Novaaquatics. Su vuelta a la natación le costará caro a Amanda, pues deberá renunciar a compromisos comerciales que son muy bien retribuidos, puesto que una sesión con Amanda puede costar unos 15.000 dólares. La intención de Amanda es poco a poco aumentar su ritmo de entrenamiento en la Universidad del Sur de California y retornar a las competiciones con el propósito de vencer en los trials de su país para los Juegos Olímpicos de Pekín que supondrían sus cuartas olimpiadas.

En la nota; The New York Times, exclamó; “Lo más difícil, es levantarse temprano por la mañana para ir a entrenar, pero una vez en la piscina me entusiasmo con el entrenamiento duro”, aseguraba al periodista Beard.

  Amanda obtuvo mucha popularidad después de Atenas, no tanto por sus virtudes de pechsita, sino como por su atractivo físico, donde rápidamente la agencia Octagon (http://www.octagon.com/), la mayor en EEUU en la representación de deportistas, le buscó todo tipo de patrocinadores para utilizar su imagen pública en la promoción de todo tipo de bienes.

Lo que rescato de Amanda (esta gran nadadora olímpica), es que a pesar de vivir en un mundo de hoteles de 5 estrellas, entre mega eventos, y las variantes de un mundo ciertamente material, persiste en ella "la esencia de los verdaderos deportistas", que es; la conducta al entrenemiento, y la de seguir luchando día a día, por su gran pasión espiritual, la Natación.

Alejandro M. Lecot – especial para; WWW.NATACION.COM.AR

alejandroecot@yahoo.com – 2007 – Argentina