El Amor y el Saber Nadar los Salvo…

Una pareja de La Plata salvó milagrosamente su vida luego de que la embarcación en la que intentaban llegar a Colonia, Uruguay, sufriera un repentino accidente que terminó provocando su hundimiento en cuestión de segundos. Ante ese cuadro dramático, Luís Crespo, de 45 años, decidió dejar a su novia Laura Di Battista, de 37 años, con dos chalecos salvavidas, para llegar hasta la costa a nado, distante a unos 7 mil metros del lugar donde quedaron a la deriva. "Tuve que salir a pedir ayuda porque si me quedaba allí, nos moríamos los dos", contó Crespo al reencontrarse ayer, tipo 23.30 horas, con el personal de Prefectura. El operativo fue inmediato y eficaz; un guardacostas, tres embarcaciones rápidas y un helicóptero. Doce horas a la deriva en medio del río. Sola. Con frío. Con olas de más de un metro. Le rezó a la virgen. Se angustió por las asignaturas pendientes de la vida. Y por sobre todas las cosas, pensó mucho en sus dos hijas…

El prefecto mayor Jorge Blati, jefe de Prefectura La Plata junto a Luis y Laura.

Laura di Battista, la mujer que sobrevivió a un naufragio y a mantenerse a flote doce horas en el Río de la Plata, consideró hoy como “una prueba más que de amor” al tremendo esfuerzo que realizó su novio, Luis Crespo, quien nadó seis kilómetros contra la corriente para solicitar ayuda a la Prefectura, que finalmente logró realizar un rescate exitoso. “Saqué fuerzas de la desesperación”, sostuvo Crespo al intentar encontrar una explicación para su maratónica aventura, ocurrida el martes pasado, cuando la lancha en la que regresaban desde Colonia, Uruguay, naufragó en medio del río. A la una y media de la mañana dieron con ella, que al ver la luz del helicóptero empezó a gritar, hacer señales y soplar el silbato del chaleco. Un hombre se tiró desde el guardacostas y la subió al barco. Estaba shockeada y congelada. A las cuatro de la mañana una ambulancia que la esperaba en la costa la llevó al hospital Cestino de Ensenada. Luego de haber sido rescatada, Laura Di Battista, expresó: "En un momento la lancha se averió. Se abrió el piso y empezó a entrar el agua y a hundirse", cuenta Laura. En minutos vieron desaparecer sus bolsos, sus documentos y celulares. "Gracias a Dios teníamos los chalecos salvavidas puestos", resalta la mujer. Ahí fue cuando hubo que tomar una decisión: "¿Qué hacemos?", se preguntaban los dos sin poder contestar.  Luís decidió buscar ayuda. No era simple. Estaban a 6.000 metros de la costa. "Quise nadar, pero no podía, no tenía fuerza", cuenta Laura. Luís le dio un besos, y salio a nadar en búsqueda de ayuda. Laura permaneció a la deriva en cercanías de Quilmes el martes último a las 15,30 y fue rescatada por Prefectura Naval en la madrugada de ayer, luego de permanecer unas 12 horas flotando, tras la decidida acción de su novio, que nadó durante 7 horas para llegar a las costas de Hudson en busca de ayuda. "Nos íbamos para Colonia, no estábamos muy lejos de ese lugar, pero yo me sentía muy descompuesta y decidimos volver. De pronto sentimos un fuerte ruido y vimos que se abrió el piso, de pronto empezó a entrar agua por todas partes y en segundos, pese a que nos quisimos agarrar de los asientos, todo desapareció. Nos quedamos en el agua", recordó aún impactada por el episodio.
Mas allá de que su novia le imploró que no la dejara sola, Luis supo que la única forma de sobrevivir era ponerse a nadar hacia la costa. "Nunca dejé de mirar hacia la tierra para no perder el punto geográfico hacia donde tenía que dirigirme. Luego caminé con el agua a la rodilla durante una hora hasta que por fin, después de atravesar la selva, llegué a un camping que se llama "El Uruguayo", allí me puse en contacto con amigos que pidieron la ayuda de Prefectura, cuando ya eran casi las 11 de la noche. Yo volví a La Plata, y con un semi rígido también ingresé al río para buscarla", señaló. Llegado el rescate, con la ayuda de los efectivos del guardacostas Lago Colhué, la aeronave de la institución, se iluminó el sector de la emergencia y se logró localizar a la mujer a la 1,25 de ayer. Un efectivo se arrojó al agua y, luego de tranquilizarla para que cooperara con el rescate, la izó al guardacostas. Allí se le practicaron los primeros auxilios porque la mujer presentaba un fuerte estado de shock y lógicamente de hipotermia, producto del frío y desesperación. Luego de ser compensada, a eso de las 4 de la mañana de ayer llegó al Puerto de La Plata, donde la esperaba una ambulancia que la trasladó al Hospital Horacio Cestino de Ensenada, lugar en el que permaneció hasta el mediodía bajo observación médica.
Laura expresó a la prensa: "Mientras flotaba, sentí mucho frío, se me adormecían los labios, fue desesperante ver como se hacía la noche, por momentos me quedaba dormida y trataba de mantenerme despierta. Las olas eran de más de un metro, pero recé mucho y siempre mantuve la esperanza, por eso cuando vi los helicópteros de la Prefectura sentí que volvía a nacer. Tengo una gratitud inmensa hacia todos los que intervinieron en mi rescate, gracias a ellos y a mi novio, hoy puedo contar lo que me tocó vivir". "Fue tremendo. Pedía que Luis llegara sano. Por suerte tiene un muy buen estado físico y no fuma, eso lo ayudó". Laura –tiene una revista y un programa de televisión sobre decoración y paisajismo- y Luis, ayer no podían creer que estaban vivos después de semejante accidente. Luego hablaron de sus hijas: ella tiene dos de 10 y 14 años y él una de 10, de matrimonios anteriores. "Volvimos a nacer. Sin dudas, volvimos a nacer", expresaron ambos…
El personal de Prefectura que participó del operativo señaló que en accidentes como el ocurrido con la lancha Bermuda Linx, las primeras horas son fundamentales. "En una hora veinticinco pudimos encontrar a la mujer, además había olas de 1,20 mts y 32 Km. de viento. Hay que destacar que ambos se salvaron porque llevaban puesto el salvavidas y además su novio le dio uno extra, eso fue fundamental para seguir con vida y superar ese episodio", expresó el prefecto mayor Jorge Blati, jefe de Prefectura La Plata.
Increíblemente ante la adversidad; el buen estado físico de Luis Crespo, la utilización departe de ella de los salvavidas, la eficaz labor de la Perfectura Argentina, y por sobre todo el saber nadar & el amor que los une, los hizo salvar de la odisea…

Alejandro Lecot – WWW.NATACION.COM.AR